La inspección de trabajo da la razón a UGT en las 3 denuncias interpuestas contra Linecar por las condiciones de trabajo que mantiene la empresa

UGT denunció el pasado mes de diciembre ante la inspección de trabajo en Valladolid a la empresa de transportes de viajeros por carretera Linecar hasta en tres ocasiones por una serie de deficiencias que afectaban y, en palabras de los representantes sindicales, siguen afectando directamente tanto a los trabajadores como a los vehículos y las condiciones en las que trabajan y, por tanto, a su salud laboral. 

De esta manera, la inspección de trabajo ratifica en una de sus resoluciones que, en efecto, la empresa no dispone de un registro de control horario adecuado para los trabajadores y de que sus cuadrantes son incompletos y, en cada turno entregado, faltan al menos, los cuadrantes de otros dos trabajadores. Sin embargo, el Estatuto de Trabajadores establece en su artículo 34.9 que la empresa debe garantizar el registro diario de jornada, incluyendo horario de inicio y finalización. Igualmente, según el mismo ET, el empresario tiene la obligación de organizar y documentar, previa consulta con el representante de los trabajadores, el registro de dicha jornada. También, de conformidad con el Art. 88 de la LO 3/2018, de 5 de diciembre, de Protección de Datos Personales y garantía de los derechos digitales de los trabajadores y los empleados públicos tendrán derecho a la desconexión digital a fin de garantizar, fuera del tiempo de trabajo legal o convencionalmente establecido, el respeto de su tiempo de descanso, permisos y vacaciones, así como su intimidad personal y familiar”. Por tanto, la inspección determina que la empresa está incumpliendo la ley en este ámbito y obliga a la empresa a establecer un protocolo de horarios y cuadrantes para toda la plantilla con antelación suficiente para permitirles disponer libremente de su tiempo y conciliar su vida familiar y laboral respetando su derecho a la desconexión digital.  

Además, en otra resolución obliga a la empresa a compensar a un trabajador que venía desempeñando su jornada semanal en turnos no reglados de seis días continuos, sin los descansos necesarios, ni compensación económica, subsanando su situación en el plazo de una semana y abonando los pagos adeudados por exceso de jornada. No obstante, la inspección advertía del plazo de una semana para la subsanación y, de acuerdo con los representantes sindicales, el plazo ha vencido hoy sin que Linecar haya acatado la sanción impuesta. 

Asimismo, desde UGT denunciaron ya en su momento que la empresa dispone de unas cocheras 
en el Polígono de San Cristóbal que se encuentran en un estado de conservación muy deficiente, 
con una iluminación insuficiente que no permite que los trabajadores puedan circular adecuadamente o desarrollar sus actividades sin riesgo para su seguridad y salud. De hecho, en las mismas instalaciones, el suelo es irregular y resbaladizo. Se encuentra agrietado y carece del mantenimiento adecuado.

La inspección de trabajo determina, de hecho, en su evaluación de riesgos que hay atmósferas explosivas de gas en el taller (depósitos de gasóleo) y en la zona de surtidor de gasóleo para vehículos, por lo que obliga a la empresa, como medidas preventivas, a formar a los trabajadores y a realizar una evaluación específica de los riesgos por zonas elaborando un documento que recoja las medidas para evitar explosiones en el área de trabajo. De igual manera, en el ámbito de los Riesgos Laborales, la inspección obliga a la empresa a dotar del material necesario a los trabajadores para el desempeño de su labor y a reponerlo adecuadamente cada dos años, algo que, en la actualidad, no estaba ocurriendo y, por eso, los representantes de los trabajadores llevaban tiempo denunciando su situación.  

No obstante, según denunciando desde UGT, los plazos de subsanación de cada denuncia están venciendo sin que parezca que vaya a acometer los cambios a los que las diferentes sentencias de la inspección de trabajo les obliga.