
El PP sospecha que se trate de una represalia de Clara Martín por el incidente entre uno de los policías y el entonces concejal socialista, Alfonso Reguera, y que acabó con la dimisión de este último.
Al PP en el Ayuntamiento le resulta difícil de entender la decisión tomada por el ejecutivo de la alcaldesa socialista Clara Martín de expedientar ahora a los agentes de la policía local que hace unos meses se subieron al canal del Acueducto para tratar de salvar la vida a un presunto suicida, hecho por el que recibieron la medalla de Oro al Mérito Policial de la Junta de Castilla y León. A los populares les extraña que lo hagan en este momento, más de 6 meses después de lo sucedido, y consideran inexplicable la razón esgrimida por la alcaldesa Clara Martín, de esperar a que el agente herido se incorporase a su trabajo.
Desde las filas populares señalan que, “en ocasiones excepcionales, cada segundo cuenta, y hay que tomar decisiones rápidas para, como en este caso, evitar un posible suicidio y salvar una vida; algo que el gobierno municipal debería tener en cuenta”. Los populares van más allá, y se preguntan qué hubiera pasado si, por no intervenir, esa persona hubiera perdido la vida.
Los ediles de la formación popular apuntan la posibilidad de tener definido un protocolo de actuación para este tipo de casos, y así evitar situaciones como ésta. “No es de recibo que quien gobierna este Ayuntamiento genere mal estar en un servicio esencial para una ciudad. Una vez más, el gobierno socialista está volviendo a demostrar su falta de confianza en el cuerpo de Policía Local y menospreciando e infravalorando su trabajo”. Algo, que, según indican los populares, ya ha sucedido en varias ocasiones.
“Cuando dijeron que les faltaban chalecos antibalas, lo primero que hizo la entonces alcaldesa, Clara Luquero, fue cargar contra de la policía local; unos meses después, quien era su mano derecha, Alfonso Reguera, les faltó el respeto cuando, ante sus reivindicaciones, afirmó que su equipación era perfecta para lo que hacían y lo remató, amenazando en público a un agente, lo que acabó con su dimisión”, recuerdan desde el grupo popular, quienes esperan que la decisión tomada ahora de abrir este expediente no responda a una actitud de revancha por parte del PSOE por lo sucedido en aquel entonces, ya que, entre los agentes que podrían ser expedientados se encuentra, precisamente, el policía local al que amenazó el entonces concejal socialista. De ser así, señalan los populares, “estaríamos ante un comportamiento y una forma de proceder intolerable y vergonzosa por parte de quien gobierna la ciudad”.
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