Sermón a los segovianos

Pedraceños, riaceños,
velillenses, ayllonenses,
lagranjeños pedigüeños,
duruelenses, cozuelenses…,
de pueblos grandes-pequeños
como Cuéllar, Cantalejo,
Muño, Torrecaballeros,
Fresno, Valseca, Tizneros…,
Sotosalbos, Valdeprados,
El Espinar, Cantimpalos,
Águilafuente, Turégano…,
Sebúlcor, Zamarramala,
Prádena, Duratón, Casla,
San Rafael, Guadarrama,
Santibáñez, Santa Marta,
Martín Muñoz de las Posadas…,
Sepúlveda, Valsaín,
La Armuña, Villacastín,

Valverde, Yanguas, Serracín…,
Bercimuel, Madona, Coca,
-su castillo me la toca-,
Riofrío, Navafría,
Lastras, Cobos, Torrecilla,
Fuentepiñel, Hontalbilla,
Tabanera, La Lastrilla,
Berrocal, Boceguillas…,
Tabanera de la Luenga,
Sacramenia, Fuentidueña,
Cuevas, Los Valles, Valtiendas,
Estebanvela, Villovela,
Villaseca, Torreiglesias…,
Chatún, Mudrián y otras pueblas…

Cumplid estos Mandamientos:
no herir al prójimo nunca,
no fornicar en el sexto,
no desear la mujer
de los otros, el noveno,
no mentir, que ese es el séptimo…

amar a padres y madres
por sus muy muchas bondades,
y a la Iglesia otorgar diezmos
de los trigos, las cebadas y centenos…,
Así Dios perdonará
a cuantos contra Él pecáis
en esta vida terrena…
por intentar ser modernos.
¡Qué dolor, qué dolor, qué pena
la de este jodío tiempo
que tenemos por hodierno.