El Partido Castellano pide al Gobierno que destine 40 millones de euros a un Plan de Desarrollo Rural en Segovia

Formando parte del casi centenar de enmiendas a los Presupuestos Generales del Estado para 2017 que ha presentado el Partido Castellano (PCAS), y que suponen un incremento de las inversiones previstas para Castilla cercano a los 800 millones de euros, la formación castellanista ha incluido la habilitación de una partida de 40 millones de euros para la creación de un Plan de Desarrollo Rural, específicamente destinado a combatir la despoblación y el envejecimiento en las comarcas rurales de la provincia segoviana.

La enmienda será votada por el Pleno del Parlamento en breve y desde el Partido Castellano confían en un voto favorable de los parlamentarios de los partidos estatales mayoritarios que representan a la provincia de Segovia, a esta propuesta, dicen, “fundamental para frenar las tendencias regresivas que abocan a la desaparición demográfica a más del 50% del territorio de la provincia de Segovia”. Las enmiendas del PCAS han sido presentadas a través de los parlamentarios de la formación Compromís, con quienes los castellanistas, junto con Chunta Aragonesista, comparten la Coalición Primavera Europea.

Entre otros asuntos, el PCAS recuerda en su enmienda que el territorio rural de la provincia de Segovia, la práctica totalidad de sus 209 municipios, está sometido a un “feroz proceso de despoblación”, argumentando que la provincia ha perdido 10.000 habitantes en seis años y pierde más de 300 residentes anuales, la mayor parte de ellos jóvenes, lo que le da una densidad de población media en las comarcas rurales inferior a 8 habitantes/km2,., mientras que en algunas zonas del nordeste segoviano cuentan con densidades inferiores a 2 habitantes/km2. .

El Partido Castellano propone con esta partida de 40 millones de euros, poner en marcha un Plan de Desarrollo Rural, centrado en las Comarcas más despobladas de la provincia, articulado sobre la implementación de políticas activas tendentes a la fijación de población, mediante la mejora de la calidad de los servicios públicos esenciales, que garantice el acceso universal a internet de calidad, así como unas inversiones en la atracción de jóvenes que apuesten por vivir en el medio rural y crear allí sus proyectos empresariales y laborales. Los castellanistas destacan, por último, la “responsabilidad” de sus enmiendas, al no haber incrementado el gasto público en un solo euro, “financiándose en base a recortar partidas de gastos suntuarios, propaganda, actuaciones innecesarias y prescindibles, fondos de contingencia e imprevistos, y partidas para actividades no clasificadas que habitualmente esconden enormes fondos para uso discrecional y arbitrario de los diferentes ministerios, o recursos que finalmente no se ejecutan”.