"Duques de Palma", una calle para la polémica

Cuando se han cumplido nada menos que 34 años desde las primeras elecciones municipales, el callejero de las ciudades y pueblos sigue siendo un tema permanentemente abierto a la controversia política y ciudadana. La dedicación de calles y plazas a personajes o enseñas del régimen anterior ha originado desde entonces polémicas que en muchos sitios nunca han acabado de cerrarse.

Sin embargo, el caso que se acaba de poner sobre la mesa no tiene que ver con el franquismo, sino con la actual familia real. Se trata de la petición elevada al ayuntamiento de Burgos para que suprima del callejero de la ciudad la calle dedicada a los “Duques de Palma”. La solicitud la ha cursado el Partido Castellano (PCAS), que considera que la conducta “poco ejemplar” de Iñaki Urdangarín y de la infanta Cristina les hace indignos de merecer la calle que en su día les dedicó la ciudad.

Argumenta el PCAS-Burgos que ser titular de una calle constituye “un acto de homenaje y reconocimiento público general”, lo cual no se compadece con una conducta presuntamente delictiva “que sólo merece la reprobación general”. Y apoya su argumento en el hecho de que la propia ciudad que da nombre a dicho titulo nobiliario, Palma de Mallorca, haya decidido por unanimidad retirar de su callejero la calle “Duques de Palma”.

El partido castellanista sugiere al consistorio de Burgos que dedique esa calle a Miguel Delibes, quién, pese a su reconocimiento universal como escritor y su intensa vinculación con la provincia burgalesa, permanece ausente del callejero de la capital. (El propio PCAS propuso hace unos meses bautizar con el nombre del escritor el nuevo bulevar ferroviario, propuesta que fué ignorada por el gobierno municipal del PP). No descarta “El topillo” que algún día el ayuntamiento burgalés se digne en dedicar una calle a Delibes, pero se llevaría una gran sorpresa si el el equipo de gobierno que encabeza el alcalde Javier Lacalle retirara la calle a los Duques de Palma.