El camino del color para un 'Día plujós'

Dice José María Parreño, comisario de la nueva exposición que ayer inauguró el Museo Esteban Vicente, que "el arte moderno es un arte del color" y que cuando eligió el título para la nueva muestra que el Museo exhibirá hasta el próximo 16 de octubre, 'El camino del color', no sabía que Matisse, nexo entre Esteban Vicente y Albèrt Rafols-Casamada, había escrito antes un texto titulado así.

Cuenta también que si a algo se debe ese título es a que, a pesar de que Esteban Vicente y Ràfols tenían establecida una relación invisible en la que se incluía que ambos eran pintores al tiempo que profesores, y abstractos al tiempo que mantenían un atisbo figurativo, y entregados al pincel al tiempo que se escapaban entre collages y esculturas de vez en cuando, "en los años '50 compartían algo inusual, y es que todos los artistas abstractos eran más bien oscuros, teneboros, lúgubres, pero curiosamente esto no era así en ellos dos".

Quizás fueron ellos el propio camino -o parte del mismo- que consiguió que, a pesar del título, la exposición en la que se recogen una veintena de obras de ambos autores, no sea la más colorista que ha acogido el Museo en los últimos tiempos. Sí es, sin embargo, una que enseña la senda de cómo encontrar en un 'Día plujós' el gris claro que se convierte en amarillo, en azul, y que en el siguiente cuadro transforma el día en el que un pobre infeliz paró el reloj infantil de 'Penélope' una tarde plomiza de abril. Tan plomiza como el cuadro de Ràfols, que aún así, deja colarse esperanzadores blancos y azules.

Los cuadros del pintor catalán y del segoviano conducen hasta el color, dialogan, según José María Parreño, en un ejercicio que en un principio fue sólo una idea de la directora del Museo, hoy ausente por maternidad, pero presente en las palabras del director gerente, Luis Miguel del Pozo, quien recordaba a Ana Doldán citando a Ràfols, hablando a su vez sobre Esteban Vicente y su obra afirmando que "era gozo, placer de pintar, vitalidad plena". José María Parreño reconocía que en un principio "conocíamos la admiración mutua; se gustaban como pintores" y que posteriormente vieron si la idea de relacionar una obra con otra era viable. "Lo que no hemos conseguido traer han sido las pequeñas esculturas de Rafols; son indistinguibles de las de Esteban Vicente", lamentaba el comisario de la exposición, quien, sin embargo, se mostraba satisfecho de haber podido llevar a cabo "este particular homenaje a estos dos artistas en cuya obra apreciamos un espíritu afín", como ha dejado escrito Ana Doldán en el catálogo de la exposición.

En cuanto a lo que los visitantes del Museo podrán ver a lo largo de estos meses sobre las paredes de la sala 1 y 2 del Museo, Parreño matizaba que "no son pintores que se copian ni son cuadros que se parezcan; simplemente hay puntos de encuentro", y explicaba que "se han colocado los cuadros tratando de establecer conexiones visuales". Mientras que en la primera sala, donde se encuentran los ya citados 'Día plujós' y 'Penélope', las paredes se enfrentan presentando a un lado tonalidades más claras y al otro azules oscuros, morados y verdes; "es parecido a la creación de un espacio ilusorio, de una profundidad en el cuadro", apuntaba el comisario, en la segunda sala se pueden encontrar, con algo más de facilidad, esas figuras que Parreño indica que existen en la obra de ambos. Buzos nadando sobre un submarino amarillo se pueden llegar a imaginar en el 'Blue' de Esteban Vicente y una puerta que abre el catálogo de la exposición se podría apreciar en el 'Obertura blava'de Ràfols. Y color, mucho más color que en la primera sala, y eso a pesar del negro de Esteban Vicente en 'Faraway', y sobre todo gracias a su intenso verde en 'Before harvest'.

'Cosecha', que es la traducción a ese 'antes' de Esteban Vicente, es lo que han conseguido en su Museo, logrando unir los carboncillos, los acrílicos sobre tela, los óleos sobre lienzo, los collage de dos pintores abstractos que como dijo Ràfols de Vicente, construyeron -también el catalán- "paisajes interiores donde circula el viento".