Los ganadores del Concurso Infantil "¡Cómo Me Muevo Por Mi Ciudad!" reciben sus premios

Conocer cómo entienden los niños más pequeños, los de tres a seis años, los desplazamientos por la ciudad era uno de los objetivos del concurso “¡Cómo me muevo por mi ciudad!” convocado por el Ayuntamiento con la colaboración del Centro Comercial Luz de Castilla, durante la programación de la Semana Europea de la Movilidad. El segundo, ir creando en ellos la conciencia de una movilidad más sostenible en su entorno.

Con la sencillez que corresponde al dibujo de artistas tan jóvenes, los niños son capaces de mostrar sus preferencias por el autobús, por pasear o por la bicicleta, medios de transporte sostenibles y para ellos, a la vez, divertidos. Pero también, reflejar lo menos saludable.

El jurado formado por representantes del Centro Comercial Luz de Castilla, la Fundación ANAR, UNICEF y el Consejo municipal de la Infancia de Segovia, tenía la difícil tarea de elegir a los ganadores.

Vistas las diferentes propuestas, el primer premio era para Leyre Martín Gilsanz, por su dibujo titulado “Segovia, Guapa y Divertida, en autobús, bici y monopatín”. Leire recibía de manos del concejal de Tráfico y Movilidad, Ramón Muñoz-Torrero, una bicicleta.

Para el segundo premio, Diego Martín Yagüe, con su dibujo “Movilidad Limpia, Movilidad Sucia”, y para el tercer premio, Laura Martín de la Calle, con su dibujo titulado “Voy al parque en bici” el premio fueron sendos patinetes.

Al resto de pequeños artistas se le hacía entrega de un pequeño obsequio, para agradecer su participación y animarles a que sigan dando rienda suelta a su creatividad.

La entrega de premios resultaba un acto entrañable para los artistas y sus familias. Los niños se convertían en protagonistas de una actividad destinada exclusivamente a los más pequeños. Los adultos podían comprobar el talento de los jóvenes pintores y cómo los retos de la movilidad sostenible ya han calado en ellos. Y es que sus dibujos reflejan el momento actual que viven, tanto la movilidad "limpia": el camino escolar, los paseos en bicicleta, el patinete, como la movilidad "sucia": la contaminación, la nube de polución que provoca el uso del coche particular...

En definitiva, todo un ejemplo de lo que los más pequeños pueden enseñar a los mayores.