Ayer, 9 de septiembre, los vecinos Lastras de Cuéllar recibieron un aviso por parte del Ayuntamiento de dicha localidad, donde se les informaba de que el agua no era apta para el consumo humano porque los niveles de arsénico eran elevados.
Tras una inspección de Sanidad se detectó que los índices de este elemento tóxico estaban por encima de lo normal para el abastecimiento de agua potable en la localidad.
Acto seguido se anunció a los vecinos de éste hecho con un avisó en el cual, la alcaldesa informaba de que el agua no es apta para el consumo humano hasta que el nivel de arsénico vuelva a la normalidad. Las causas aún se desconocen, pero según Cuéllar 7.com, “el suministro de agua potable de Lastras procede de aguas subterráneas y, se baraja como causa más probable de estos índices de contaminación, el hecho de que haya bajado el nivel del agua del sondeo subterráneo, como consecuencia de un aumento en el consumo, debido al incremento de la población residente en el municipio, en estas fechas estivales” ya que hay que recordar que el 8 de septiembre, un día antes del aviso, la localidad celebraba sus fiestas patronales.
La alcaldesa, Victoria Avial, por su parte, ha dicho que este suceso ha podido ser consecuencia de la red de abastecimiento de la localidad que es muy antigua y necesita una renovación urgente.
De momento y hasta nuevo aviso, los vecinos de Lastras de Cuéllar beberán agua embotellada que el Ayuntamiento reparte por 30 céntimos y solamente a los empadronados en el municipio.
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