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PRESENTACION DE LAS MUJERES SEGOVIANAS A LAS QUE DESEAMOS CONMEMORAR

Zoquejo | 228 Sábado, 03 de Marzo de 2012 Tiempo de lectura:

Fuencisla Garrido Velasco, propuesta por Urbanos Segovia. Tiene 62 años, vividos desde la sencillez, la austeridad castellana, el tesón y el espíritu de superación ante las dificultades.

El trabajo ha estado en el centro de su vida desde su infancia. Siendo la pequeña en una familia de 7 hermanos, pronto aprendió y debió afrontar la tarea de ayudar a su padre en las tareas del campo cuando los hermanos mayores ya no estaban en casa.

Su espíritu inquieto y su interés por aspectos “no tan de chicas” le permitieron siendo muy joven aprender a conducir una moto, cuando ninguna otra mujer lo hacía y sacarse el carnet. De este modo podía tener libertad para desplazarse autónomamente y bajar diariamente en su vespa roja a trabajar a Segovia desde su pueblo natal, La Lastrilla. Esto también le permite desarrollar alguna de sus aficiones como la música y asistir a clases para aprender a tocar la guitarra.

Su interés por los vehículos no termina ahí porque más adelante va sacando todos los permisos de conducir y si se lo propusiera podría conducir hasta un camión con remolque.
A Fuencisla la vida le ha cerrado algunas puertas, pero también le ha abierto muchas ventanas. Una de las más importantes fue la oportunidad que le ofreció la empresa Urbanos de Segovia en el año 1990 para trabajar como conductora de autobuses.

Su entrada en la empresa fue todo un acontecimiento, al principio la gente se sorprendía de ver “una señora conductora al volante”, pero poco a poco ella se fue ganando el cariño y el respeto de todos desde su buen hacer y su vocación de servicio. Estos 21 años como conductora le han permitido ganarse dignamente la vida, desarrollar su habilidad para la conducción, tomarle el pulso del día a día a la ciudad de Segovia y, lo más importante, como ella siempre dice “mi mejor recompensa es recibir el cariño que me da la gente”.


María Martín, deportista, propuesta por el Instituto Municipal de Deportes. Es deportista, tiene 41 años y fue finalista olímpica en los Juegos de Seúl del 88. Tiene quince títulos de Campeona de España. Ejerce como profesora de INEF de la Universidad Politécnica de Madrid. Ha realizado interesantes trabajos de investigación y en la actualidad, trabaja sobre el modo diferencial de aproximarse a la práctica deportiva los hombres y las mujeres. Es miembro del Club de Mujeres “María Zambrano” y madre de una preciosa niña de 18 meses.

Marta  Calvar Cerecedo, propuesta por la Academia de Artillería. Tiene 38 años, es la teniente psicólogo del cuerpo militar de Sanidad de la Academia de Artillería de Segovia. La vocación militar le viene de familia, su padre y hermanos también son militares;  por lo que la carrera militar ha sido una opción natural, no condicionada al género. Su formación la realizó como civil en la Universidad Autónoma de Madrid, lleva 6 años en las Fuerzas Armadas, y ha estado anteriormente destinada en la Escuela de Suboficiales de la Armada en San Fernando, Cádiz, donde nació su hija hace 3 años”.

Gabriela Martín Avendaño, propuesta por la FES. Es técnica en diseño gráfico y además se licenció con matricula de honor en Bellas Artes en Caracas, ciudad en la que nació,   completó su formación en Estados Unidos en diseño de interiores y en la Casa de los Picos de Segovia sobre revestimientos murales, en 2010 obtuvo la homologación de la licenciatura a título Europeo.

En 2003 eligió España para vivir y desde el 2005 es vecina de Segovia, donde ha trabajado como profesora de diseño comercial y escaparatismo,  fue Directora de Interiorismo de Indivisa Comunicación (grupo R&D), durante este periodo su labor fue reconocida con diversos premios de diseño a nivel nacional así como con la publicación de su trabajo en revistas especializadas. En el año 2010 decidió dar el paso a establecer una empresa propia y en 2011 fundó 'gm estudio: diseño integral' junto a otros tres socios, actualmente 'gm-estudio' dedica parte de sus esfuerzos a dar servicios de diseño gráfico, interiorismo y organización de eventos para empresas y particulares principalmente en Segovia y Madrid.

Su compromiso con la difusión de la importancia del diseño le han hecho vincularse como colaboradora a iniciativas como el palacio de Quintanar . Su empresa forma parte de FES desde su nacimiento y participa de manera activa de la vida empresarial mediante planes que difunden la importancia de la imagen y el diseño para el posicionamiento de las empresas regionales

Carmen Muñoz García, propuesta por el colegio de abogados, tiene 78 años y resulta francamente difícil sintetizar en unas líneas los hitos del itinerario vital de Carmen. Nacida en una familia de intelectuales, una enfermedad la apartó de los estudios de Bachillerato a los que no renunció pues había tomado la firme decisión de hacer una carrera. Volvió a los estudios por su cuenta, sin profesor y por segunda vez,  la enfermedad y muerte de su madre la mantuvo durante 20 años como ama de casa. Al concluir sus responsabilidades con la familia, casi a escondidas inició estudios de Derecho finalizando en 4 años la carrera con premio de escolaridad por matrículas de honor. En el campo del Derecho ha cosechado numerosos éxitos, siendo premio extraordinario de licenciatura, ejerciendo como profesora no numeraria en la Universidad Complutense de Madrid.

En Junio del 77 formó parte de la candidatura al Congreso de los Diputados en las primeras  elecciones democráticas junto a otros cinco candidatos. Su primer discurso en esa campaña electoral fue en Escalona del Prado y versó sobre la Defensa de los Derechos de Mujer.
En el año 1979, por votación popular obtuvo la Alcaldía de Santa María la Real de Nieva, su pueblo,  en las primeras elecciones democráticas municipales, responsabilidad que ejerció hasta el 1983.

Posteriormente opositó a la Jefatura de Gestión Parlamentaria de Régimen Interior de las Cortes de Castilla y León, consiguiendo la única plaza que se convocaba, cargo que ha ocupado durante los últimos 20 años de su vida laboral que concluyó a los 70 años.

Lola Carrasco Ruiz, propuesta por Cruz Roja. Es bombera conductora en la Comunidad de Madrid, tiene tres hijos y hoy cumple 49 años. Tras un rosario de experiencias laborales en muy diversos ámbitos, a los 29 años concienció su vocación de bombera. Hubo de preparase muy duramente para la superación de las pruebas de conocimiento legal y específicas, así como para las físicas y de mecánica teórica y práctica. Opositó al puesto de bombera entre 500 aspirantes obteniendo una de las cuatro plazas que se ofertaban en su promoción y pasando a ser de este modo la primera bombera conductora de la Comunidad de Madrid. Lleva ya quince años en esta profesión con la que se identifica plenamente y actualmente trabaja en las Rozas.

Amanda Brunete de Pablos, propuesta por FEMUR, es herrera de profesión, tiene 39 años y es de Tizneros. Curso estudios de enseñanza artística en La Casa de Los Picos especializándose en Volumen y escultura. Le interesó  el hierro como material de expresión, lo que la llevó a observar los trabajos realizados por otros herreros en elementos estructurales, arquitectónicos  y también decorativos.

La investigación, la necesidad de retos, y las horas de trabajo en el taller la sitúan primero como herrera de fragua, permitiéndola trabajar posteriormente en la restauración e interpretación del Patrimonio.

Las dificultades encontradas en su primera etapa y en la de aprendizaje fueron las propias del oficio. Es claro ejemplo de que hay un lugar para ella en este oficio y  que todo es viable siempre que tenga un sentido.

Emiliana Martín Herrero, propuesta por ISMUR, lleva 78 años viviendo en Espirdo (Segpvia) donde nació junto a siete hermanos. Como ejemplo de muchas mujeres de nuestros pueblos, desde muy joven se dedicó a los sectores de la agricultura y la ganadería junto con la gestión de una panadería que llevaron en forma de Tahona a Segovia. Cuando aún no contaban con tractores, Emiliana ya pasaba cientos de horas arando en el campo con el reloj del sol, ordeñando las vacas o cuidando sus ovejas junto a su marido Esteban de Frutos, con el que ha pasado 55 años de alegrías y fatigas, para poder ofrecer una educación a sus cuatro hijos y vivir dignamente “siempre nos hemos conformado con poco…con tener un duro en el bolsillo”.

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