‘Un momento, una oportunidad’: Las artistas Chiri Kuroiwa y Amalfy Fuenmayor exponen su ‘Coincidencia’ en el Campus María Zambrano de la UVa en Segovia

Ichi-go, ichi-e, (Un momento, Una oportunidad), es un concepto japonés, gestado en el seno de la ceremonia del té, que invita a honrar cada encuentro, por muy breve o efímero que nos parezca. Bajo el influjo de este carpe diem nipón, Chiri Kuroiwa y Amalfy Fuenmayor, dos artistas internacionales de distintas latitudes y trayectorias vitales, se han unido para exponer su ‘Coincidencia’ en el Campus María Zambrano de la UVa en Segovia.

Ambas creadoras tienen en común el uso de la tinta, el collage, los elementos extra-pictóricos y la denuncia simbólica. Todo esto se aúna al hecho, aparentemente fortuito, de coincidir en un momento y en un lugar determinados en una galería de Kioto en el año 2022. “Allí coincidimos, no solo en tiempo y en espacio, sino en el uso del arte como vía de expresión e instrumento catártico y terapéutico”, explica Amalfy Fuenmayor, para quien “coincidir significa reconocer que, entre millones de posibilidades y caminos, hubo un punto en que ambos compartieron un espacio común. No solo físico, sino emocional. Es entender que esa conexión, aunque breve o prolongada, tiene su significado profundo”. Esta artista, que utiliza el hilo de manera simbólica para trenzar su obra, entiende que: “En la trama vital, somos como hilos unidos por el telar universal que conoce la trascendencia de esa conexión para la totalidad del tapiz que sabiamente se va tejiendo”.