El enigma de la imagen del ataúd que apareció en un contenedor de basura en la calle Ochoa Ondátegui de Segovia, muy cerca del Acueducto, que se extendió como la pólvora por las redes sociales este miércoles, ya está resuelto. El féretro formaba parte de la decoración de Halloween de la discoteca cercana Hook, según han confirmado fuentes de la Policía Local. “Iban a trasladarlo, lo dejaron ahí un momento y alguien aprovechó para hacer la gracia”, comentan. En efecto, entre las imágenes que circularon a lo largo de la tarde, había una en la que un graciosillo se hacía ‘el muerto’ dentro de la caja mortuoria, de unas dimensiones más reducidas de lo habitual.
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